
Como recuerdo el embeleso,
que sintiera por vez primera,
en aquel inocente y furtivo beso,
que a mi novia una vez diera.
Tierno beso aquel de enamorados,
de aquellos rojos labios carmesí,
de bellos ojos de pasión entornados,
que diciendo "no" decian "sí".
Hoy que los años han pasado,
y de que otros labios probé su miel,
de aquel beso tierno y apasionado,
del que guardo su recuerdo con fervor,
ha quedado en mi alma aprisionado,
y de todos los besos, será siempre el mejor.